martes, 25 de febrero de 2014
18 meses...
Fundido mi corazón en esta explosión salvaje de verde que me rodea, mi alma empieza a entender la comunión de tu sangre en la mía... Desde esa celebración me entrego sin esfuerzo a escribirte en primera persona... Gracias por tu onírica visita... Necesitaba tu abrazo. Lo necesito. El para siempre es mucho tiempo... La absurda cronología dice 18 meses, pero vos y yo bien sabemos que es un minuto y una eternidad.
Te extraño. Y te amo. Siempre.
13 de febrero, 2014. Desde Montaña Encantada.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)